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lunes, 25 de abril de 2022

Plata es plata

Con la mafia trabajo yo.
Abran paso que vengo yo, vengo asaltando y vengo acabando.

Orquesta Narváez.

En una de las tantas comunas de Medellín hay un tipo que se le conoce con el alias de Fico, éste man ha montado mero gol en una bodega que trabajan el oro que llega a  la ciudad, es el atraco del siglo según los políticos y los entendidos en el hampa, 26 hombres van a estar en el plan; alias Botija, ladrón de vieja data y retirado del mundillo ratoníl por los achaques de una vejez prematura adquirida con los excesos de drogas y alcohol durante su vida joven, necesita un dinero para que le realicen una operación muy costosa y complicada a su esposa, Botija se ha dado cuenta que dicho plan ya está marchando y que pronto se habrá de realizar. También dicen que el dinero se va a repartir en partes iguales y que la suma, si el gol sale perfecto, va a ser exorbitante y que quien esté en el golpe no le va a alcanzar la vida para contar sus ganancias. Así que Botija con la necesidad encima decide ir a hablar con Fico para ver si lo deja entrar en la vuelta; Fico reconoce al Botija y le habla de la admiración que siente por él, y que por esa admiración fue que él se hizo ladrón, que la gente le decía que por su manera de ser podía ser político muy importante, no solo de la ciudad, sino del país, pero que él prefería el mundo del hampa y seguir los pasos de su héroe infantil, además que entre políticos y ladrones no había mucha diferencia, y le reitera que el Botija era su inspiración infantil.

Lo que le dice Fico lo hace sentirse cómodo y aprovecha para pedirle cabida en el golpe; Fico le habla en tono cariñoso, le explica que él está muy viejo para esas andanzas, que se dedique mejor a eso de seguir vendiendo lotería, Botija le manifiesta que si no tuviera una necesidad no iría a pedirle que lo incluyera. Fico lo mira con desdén de arriba abajo, como diciéndole que él se hace de rogar, cosa que el Botija sigue, porque sabe que en el mundo del hampa los que están abajo en cualquier momento suben y los que están arriba en cualquier momento caen.

Al final le da el papel del tránsito que ha de parar la circulación vehicular para que las motos y carros que están involucrados pueda huir.

El día del golpe el plan no salió como esperaban, 11 de los 26 implicados los detiene la policía, entre ellos el Botija, tan viejo y a la cárcel fue a dar. Botín si hubo, claro, no el esperado, pero si hubo, por lo menos a todos les tocó una buena tajada que si podían contar y que repartieron por igual, el Botija haciendo cuentas en su cabeza mientras espera en el calabozo de la fiscalía ser implicado al caso, sabe que sí le va a alcanzar la plata para la operación de la esposa y que van a sobrar algunos pesos con los que ella y su hijo podrán vivir unos meses, así que manda a su hijo a hablar con Fico.

El hijo del Botija entonces va y pide la parte que le toca a su papá, a Fico le dicen que el pelao, hijo de Botija, está ahí afuera reclamando lo que le corresponde a  su papá, Fico de mala gana lo hace pasar, escucha lo que le dice el pelao, y de mala gana le da una chichigua que no cubre ni la operación de la madre, ni la supervivencia de unos meses que pensó el Botija, el pelao le hace el reclamo al Fico, quien envalentonado le pone un arma en la frente y le dice que si está muy aletoso, que él lo pone a volar al más allá, que no se busque problemas, que plata es plata, que agradezca que le están dando dinero y que no los dejaron sin nada, porque por culpa de  su papá que se asustó cuando vio a la tomba  hizo que el robo fracasara, que vea, que era tan mal ladrón que se dejó  coger.

El pelao asustado guarda en el bolsillo la parte que le toca a su papá y se marcha.